Porque la seguridad también se construye con educación, valores y oportunidades. Por eso, este programa reconoce a las iglesias como un aliado esencial del Estado en la construcción de paz y bienestar.

En un acto cargado de reconocimiento a la labor espiritual y comunitaria, la Gobernación del Huila, en cabeza de Rodrigo Villalba Mosquera, realizó la entrega de 19 kits de fortalecimiento a diferentes entidades religiosas del departamento, reafirmando su compromiso con las comunidades de fe como aliadas en la construcción de convivencia y paz territorial.

La jornada congregó a pastores, sacerdotes, religiosas y representantes de diversas denominaciones que hacen presencia activa en los municipios y corregimientos huilenses, llevando acompañamiento espiritual, social y emocional a miles de familias.

Esta iniciativa, que representa una inversión de $76 millones, hace parte de la implementación del Plan de Desarrollo Departamental “Por un Huila Grande”, dentro del Pilar 1: Alianza para la Seguridad y el Buen Gobierno, que reconoce a las comunidades religiosas como actores estratégicos en la prevención de violencias, la cohesión social y la reconstrucción del tejido comunitario.

“Las comunidades de fe cumplen una función social invaluable. Son espacios donde se construyen valores, se promueve la reconciliación y se fortalece la esperanza. Por eso, desde el Gobierno del Huila hemos querido brindarles herramientas que les permitan seguir desarrollando su misión con mayor alcance y dignidad”, expresó el secretario de Gobierno, Seguridad y Asuntos Comunitarios, Juan Carlos Casallas Rivas.

Los kits entregados incluyen mobiliario, televisores, cabinas de sonido, video proyectores y sillas, dotaciones destinadas a mejorar las condiciones para el desarrollo de actividades pastorales, comunitarias y sociales. Los cuales fueron entregados de acuerdo con las necesidades de cada organización, permitiendo fortalecer tanto la labor espiritual como la gestión social y de convivencia que estas entidades adelantan en su territorio.

“Sabemos que la labor de las iglesias no se limita al culto. Ustedes acompañan a las familias en los momentos difíciles, previenen el consumo de sustancias, promueven la sana convivencia, atienden a los más vulnerables y son, muchas veces, la primera voz de consuelo y esperanza en nuestras comunidades. Por eso este fortalecimiento es también un reconocimiento”, destacó Casallas Rivas.

Entre las entidades beneficiadas se encuentran comunidades religiosas de Neiva, Pitalito, La Plata, Garzón, Acevedo, Campoalegre y Aipe, entre otras.

Herramientas para consolidar espacios de paz y unidad

Los kits contaron con equipos de alta calidad —como televisores LG de 55” UHD 4K, video proyectores Epson Powerlife de 3800 lúmenes, cabinas de sonido JBL, micrófonos inalámbricos y mobiliario— que facilitarán el desarrollo de sus actividades formativas, culturales y espirituales.

“El fortalecimiento institucional de las entidades religiosas es clave para la construcción del tejido social. Con estos apoyos, queremos que las comunidades de fe tengan mejores herramientas para seguir sirviendo, para convocar, para inspirar y para unir a la gente en torno al respeto, la solidaridad y la paz”, agregó el secretario de Gobierno del Huila.

También resaltó que esta entrega se suma a las acciones integrales del Gobierno del Huila orientadas al fortalecimiento de la participación ciudadana, la prevención de conflictos y la promoción de la convivencia pacífica.

“Nuestro gobernador, Rodrigo Villalba Mosquera, ha sido enfático en que la seguridad no se logra solo con fuerza pública ni con leyes, sino con educación, valores y oportunidades. Por eso, este programa reconoce a las iglesias como un aliado esencial del Estado en la construcción de paz y bienestar”, puntualizó Casallas Rivas.

Los líderes religiosos agradecieron al Gobierno Departamental por el gesto de apoyo y destacaron la importancia de este tipo de iniciativas que les permiten continuar llegando con su mensaje y su labor a más sectores de la población.

El Gobierno del Huila reafirmó su disposición de mantener un diálogo permanente y de cooperación con todas las expresiones de fe del territorio, convencido de que la espiritualidad, la convivencia y la justicia social son pilares fundamentales de un Huila más grande, más humano y en paz.